La primavera ya está aquí y con ella sigue el buen tiempo aquí por el Norte, así que he aprovechado para realizar una semana bien intensiva. Como siga sin llover voy a acabar completamente agotado ;-)
De echo, el lunes por la mañana fui al trabajo con la bici en el maletero y he estado yendo y viniendo toda la semana, hasta el viernes por la tarde. En total cuatro idas y venidas que totalizan 240 km integrando sesiones de recuperación activa, fuerza resistencia, intervalos y ritmo al umbral.
Físicamente, el cuerpo ha reaccionado muy bien y no he acusado demasiado el cansancio ya que he cuidado mucho la alimentación (y a pesar de ello, he empezado, por fin, a afinarme seriamente).
Lo que llevo peor es la alergia. En efecto, con tantos días sin llover el polen y el polvo están por todos lados y el jueves y viernes por la tarde las pasé canutas al llegar a casa.
Normal, por las mañanas como hace bastante fresquito, me pongo el buff tapándome la nariz y la boca. Con la humedad de la respiración hace de filtro e impide que me entren porquerías en los pulmones. Pero, la tarde del jueves, con el calor no me puse el buff y, encima, me piqué con un joven cicloturista que me adelantó (sobre una Trek Madonne) intentando descolgarme. Yo, aunque iba sacando el hígado le aguanté la rueda y encima, para más recochineo, me permití pegarle algún relevo. Imaginaos el mosqueo que llevaba el otro al ver que un viejo como yo (vestido con chaleco fluorescente), con una mochila de cuatro kilos encima y una bici de treinta años con más luces que un árbol de Navidad le podía aguantar el ritmo… ;-)
El ritmo lo aguanté, pero lo pagué en casa cuando empezó a hacerme efecto los kilos de polen que había tragado… aunque el viernes por la mañana ya estaba bastante recuperado y con el truco del buff y las pastillas pude mantener a raya los efectos de la alergia.
Pero por la tarde, volviendo a casa con el coche, al niño no se le ocurre otra cosa que rodar con las ventanillas y el techo abiertos… Resultado: Otro empacho de polen :-(
Bueno hoy sabado por la tarde ha caído un buen chaparrón que espero que haya conseguido limpiar un poco la atmósfera. Ya veremos como me va mañana con los Babou’s boys.
Y la semana que viene con el cambio de horario he previsto reducir la cantidad de salidas (dos como máximo si el tiempo lo permite) pero, a cambio, introduciré otra novedad: Alargaré mi recorrido por las tardes al volver a casa. Ya os contaré…
Bonne Route
De echo, el lunes por la mañana fui al trabajo con la bici en el maletero y he estado yendo y viniendo toda la semana, hasta el viernes por la tarde. En total cuatro idas y venidas que totalizan 240 km integrando sesiones de recuperación activa, fuerza resistencia, intervalos y ritmo al umbral.
Físicamente, el cuerpo ha reaccionado muy bien y no he acusado demasiado el cansancio ya que he cuidado mucho la alimentación (y a pesar de ello, he empezado, por fin, a afinarme seriamente).
Lo que llevo peor es la alergia. En efecto, con tantos días sin llover el polen y el polvo están por todos lados y el jueves y viernes por la tarde las pasé canutas al llegar a casa.
Normal, por las mañanas como hace bastante fresquito, me pongo el buff tapándome la nariz y la boca. Con la humedad de la respiración hace de filtro e impide que me entren porquerías en los pulmones. Pero, la tarde del jueves, con el calor no me puse el buff y, encima, me piqué con un joven cicloturista que me adelantó (sobre una Trek Madonne) intentando descolgarme. Yo, aunque iba sacando el hígado le aguanté la rueda y encima, para más recochineo, me permití pegarle algún relevo. Imaginaos el mosqueo que llevaba el otro al ver que un viejo como yo (vestido con chaleco fluorescente), con una mochila de cuatro kilos encima y una bici de treinta años con más luces que un árbol de Navidad le podía aguantar el ritmo… ;-)
El ritmo lo aguanté, pero lo pagué en casa cuando empezó a hacerme efecto los kilos de polen que había tragado… aunque el viernes por la mañana ya estaba bastante recuperado y con el truco del buff y las pastillas pude mantener a raya los efectos de la alergia.
Pero por la tarde, volviendo a casa con el coche, al niño no se le ocurre otra cosa que rodar con las ventanillas y el techo abiertos… Resultado: Otro empacho de polen :-(
Bueno hoy sabado por la tarde ha caído un buen chaparrón que espero que haya conseguido limpiar un poco la atmósfera. Ya veremos como me va mañana con los Babou’s boys.
Y la semana que viene con el cambio de horario he previsto reducir la cantidad de salidas (dos como máximo si el tiempo lo permite) pero, a cambio, introduciré otra novedad: Alargaré mi recorrido por las tardes al volver a casa. Ya os contaré…
Bonne Route
Si-si el polen, por aquí esta haciendo estragos también... a mi en los ojos y un estado de decaimiento, dicen q este año es bestial...ajjajja, el tio de la TRECK, jajjajajaa, se habrá ido llorando a casa y la habrá vendido en el TROC mas cercano...jajjajjaa, si supiera lo q tienes a la espalda... ya les está bien, lobo con piel de oveja....jajajajaja
ResponderEliminarPolen??? Vas a ver lo que es polen cuando vengas por aquí buuuuff. No sabía el de la Trek con quién se las veía jajaja habrá caído en depresión profunda. Mira que chulito él presumiendo de techo abierto, si es que cuando véis un rayo de sol por esos mundos se os va la olla.... Para evitar la alergia podrías comprarte una mascarilla con filtro, no será estético pero igual te ayuda.
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