Después de una semana un poco agitada a causa de la nieve ;-) este sábado tocaba reunión de familia por lo que acabé acostándome a las tantas de la noche.
Como comprenderéis, ayer domingo, yo no tenia ningunas ganas de levantarme temprano y, de todas maneras (con mi programa de entrenamiento) estaba condenado a rodar solo, por lo que , después de un gran esfuerzo acabé saliendo a las 09h15 dirección Etampes, vía la Ferté Alais, para evitar las subidas.
La temperatura no era demasiado baja (entre 4 y 7° C) aunque el suelo estaba aun mojado a causa del deshielo.
Tal que previsto, rodé suavemente sin forzar y, sorpresa, a medio camino hacia Etampes me crucé con Marc y Patrick (aparentemente los únicos que habían acudido a la cita).
La primera parte de la salida, con el viento a favor fue bastante fácil pero a la vuelta, con el viento de cara, me costó un poco más mantener a ralla las pulsaciones.
Bueno, al final, 3h10 de bici a una velocidad media que no confesaré si no es bajo los efectos de la tortura ;-) Eso sí, lo más importante, la frecuencia cardiaca: a 134 pulsaciones.
Era mi última salida del año aquí en Francia. A parir de este fin de semana ya estaré en Vilanova aunque, desgraciadamente (al menos para mí), esta vez no llegaré a tiempo para disfrutar el desayuno de Navidad con la colla Cotesua…
Bonne Route
Como comprenderéis, ayer domingo, yo no tenia ningunas ganas de levantarme temprano y, de todas maneras (con mi programa de entrenamiento) estaba condenado a rodar solo, por lo que , después de un gran esfuerzo acabé saliendo a las 09h15 dirección Etampes, vía la Ferté Alais, para evitar las subidas.
La temperatura no era demasiado baja (entre 4 y 7° C) aunque el suelo estaba aun mojado a causa del deshielo.
Tal que previsto, rodé suavemente sin forzar y, sorpresa, a medio camino hacia Etampes me crucé con Marc y Patrick (aparentemente los únicos que habían acudido a la cita).
La primera parte de la salida, con el viento a favor fue bastante fácil pero a la vuelta, con el viento de cara, me costó un poco más mantener a ralla las pulsaciones.
Bueno, al final, 3h10 de bici a una velocidad media que no confesaré si no es bajo los efectos de la tortura ;-) Eso sí, lo más importante, la frecuencia cardiaca: a 134 pulsaciones.
Era mi última salida del año aquí en Francia. A parir de este fin de semana ya estaré en Vilanova aunque, desgraciadamente (al menos para mí), esta vez no llegaré a tiempo para disfrutar el desayuno de Navidad con la colla Cotesua…
Bonne Route
Tio, eres una máquina, qué perezón, rodar solo y ahí lo tienes, qué fuerza de voluntad, bueno, pero llegas para ver el Pavo, a las 11 comienza, espero escaparme d ela Mitja y verlo donde el año pasado. Un abrazo, vente pa´Madrid Manolo!!! Aquí hace muy buen tiempo, mañana dicen q refersca pero jajajajaj, eso pa´ti.... jajajaja, será como venir unos días a Cancum!!! TE ESPERAMOS!!!
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